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La lengua de tierra denominada Cap de Formentor (cabo de Formentor) se encuentra en el municipio de Pollença en el extremo más septentrional de la isla de Mallorca. Se trata de una estrecha península de 20 kilómetros de longitud a la que los mallorquines llaman cariñosamente el “punto de encuentro de los vientos”. Esto es así porque, debido a su elevada exposición al mar, allí siempre se han dado cita los vientos de la Península Ibérica, los Alpes, el Atlántico y el norte de África, creando un paisaje de postal salpicado de acantilados y pinares. en todos lados.

El Pi de Formentor, inspirado en Mallorca

Cap de Formentor es un lugar privilegiado alejado de los principales puntos turísticos de Mallorca que ha inspirado a numerosos artistas a escribir poemas y dibujar cuadros. Miquel Costa i Llobera, uno de los más grandes poetas en lengua catalana de todos los tiempos, fue quizás el mejor para capturar la belleza del cabo en su icónico poema, El Pi de Formentor< /em> (El Pino de Formentor). Te proponemos un breve viaje por este escenario natural donde también podrás descubrir su famoso faro y explorar sus playas, calas y vistas impresionantes.

Breve historia del Cabo de Formentor

Por así decirlo, el punto de peregrinación del Cap de Formentor es su faro, una torre blanca de 22 metros de altura a la que se accede tras un sinuoso camino de 15 kilómetros. El edificio es poéticamente conocido como el Finisterre mallorquín (o el Fin de Mallorca), nada menos. Su construcción tampoco es la excepción ya que fue una auténtica gesta épica para los trabajadores de aquella época. Su construcción se inició en 1857 y, debido al paisaje accidentado, hubo que abrir un camino para poder transportar los materiales. Esta acción movilizó a más de 200 personas durante seis años, hasta el punto de que el obispo de Mallorca ordenó levantar allí un altar para que los trabajadores pudieran asistir a misa antes del trabajo.

El faro ahora se controla de forma remota, por lo que sólo quedan las palabras de ese logro épico. Sin embargo, el mejor homenaje que ahora se rinde a esos esfuerzos son las numerosas visitas turísticas al faro, considerado el más alto de la isla con una altura focal de 210 metros sobre el nivel del mar.

El faro de Formentor y sus alrededores

El faro no es la única atracción. En los 15 kilómetros que hay entre el cabo y el puerto de Pollença (no más de 20 minutos en coche), podrás disfrutar de un viaje lleno de vistas espectaculares que podrás inmortalizar con tu cámara. A lo largo del recorrido se encuentran numerosas casas de diseño cuyos propietarios han encontrado el lugar ideal para disfrutar de privacidad y tranquilidad en el cabo. También hay calas como la playa de Formentor y calas como Murta y Figuera, cada una tan salvaje y encantadora como la otra. La mayoría de excursionistas y ciclistas que visitan el cabo deciden iniciar sus rutas específicas desde esa playa. En definitiva, existe un amplio abanico de posibilidades donde la naturaleza siempre es la protagonista.

Fuentehttps://www.barcelo.com/guia-turismo/es/mallorca/cosas-que-hacer/cap-de- formentor/